http://ministros-delnuevopacto.blogspot.com/p/concordancia.html

viernes, 27 de enero de 2012

Amistad

Introducción. La Amistad es para muchos un tema muy común, muy trillado; pues bien, el objetivo de la reunión de hoy no es llegar y decirles nada más que tener amigos es muy bonito y muy bueno. El objetivo de la reunión de hoy es cuestionarnos sobre la forma en la que estamos tomando nuestras amistades desde un enfoque totalmente cristiano. Lo que vamos a hacer es ir tomando una serie de pasajes bíblicos, y de otras historias y vamos ir comentándolas un poco… Verdaderos Amigos. Eclesiástico 37: 1-6. “… Todo amigo dice: También yo soy tu amigo, pero hay amigos que lo son sólo de nombre. ¿No causa un disgusto mortal que un amigo querido se haga enemigo? ¡Oh perversa intención! ¿Para qué fuiste creado? Para llenar la tierra de maldad. En la prosperidad, el compañero se alegra con su amigo, pero en la adversidad se pone en su contra. Para llenar el vientre sufre con el amigo, pero a la hora del combate buscará defenderse. Nunca te olvides del amigo fiel y acuérdate de él cuando seas rico…” Muchas veces, cuando leemos este tipo de cosas tendemos a pensar en la forma en la que nuestros amigos se comportan según las cosas que hemos estado viviendo; y nos ponemos a pensar cuáles amigos estuvieron con nosotros en los momentos más difíciles, y cuáles amigos solo aparecen ahí para la fiesta; pues bien, este pasaje no está hecho solamente para pensar en nuestros amigos, sino para cuestionarnos a nosotros mismos como amigos, ¿cuántas veces hemos estado con una persona solo par irnos de fiesta, para ir al cine, para cuando todo está bien; sin haber estado con esa persona para oírla llorar, para simplemente preguntarle si todo está bien, para orar por esa persona en sus momentos difíciles? Eclesiástico 6: 5-17 “… Una palabra dulce multiplica los amigos, la lengua amable multiplica los saludos. Puedes relacionarte con muchos, pero amigo de verdad, uno entre mil. Si deseas ganar un amigo, ponlo a prueba y no tengas prisa en confiarte a él. Porque hay amigos de conveniencia, que te abandonan cuando llega la adversidad. Hay amigos que se pasan a enemigos, y para avergonzarte descubrirán los motivos del pleito. Hay amigos que se sientan en tu mesa y te abandonan cuando llega la adversidad. Mientras van bien las cosas, estarán unidos a ti y se mostrarán afables con los de tu casa. Pero si eres humillado, se pondrán en tu contra y evitarán incluso mirarte. Aléjate de tus enemigos y sé precavido con tus amigos. Un amigo fiel es un apoyo seguro, el que lo encuentra, encuentra un tesoro. Un amigo fiel no tiene precio, es incalculable su valor. Un amigo fiel es medicina para la vida, los que temen al Señor lo encontrarán. El que honra al Señor hace que su amistad sea valiosa, porque su amigo será como él…” Al igual que lo habíamos visto en la cita anterior, este pasaje nos advierte mucho sobre los verdaderos amigos, sobre saberlos escoger, sobre ser precavidos, sobre saber valorar cuáles amigos son verdaderos y están ahí siempre, en las buenas y en las malas. En lo personal, me gusta mucho también el versículo que nos habla sobre el valor de un amigo, ojalá no sean solo palabras, sino que en serio podamos valorar a los amigos como ese tesoro; yo creo que si de un pronto a otro encontramos un baúl lleno de moneditas de oro, pasaríamos cuidándolo, velando para que este bien, pues bien, si valoramos a los amigos como ese tesoro, que sobrepasa en mucho a un poco de monedas de oro, pues es un tesoro dado por Dios, debemos empezar a ver en nuestros amigos un regalo de Dios, un tesoro que nos ha regalado Dios, por tanto, sería tonto no valorarlos, no cuidar por ese tesoro, dejarlo olvidado, no amarlos. Ser detallistas con los amigos. Para hablar sobre los detalles, podemos ver la historia llamada "El poder de un pequeño detalle" que está en la sección de "Reflexiones Positivas" de este mismo sitio. Los detalles siempre vienen a alimentar una relación, un detalle no tiene que ser algo material y costoso; puede ser una sonrisa, una llamada, una carta, cualquier cosa. Nunca subestimemos el poder de los detalles. Preservar Amigos Eclesiástico 9: 10. “…No abandones al viejo amigo, porque el nuevo no valdrá lo que él. Vino nuevo es el nuevo amigo, cuando sea viejo lo beberás con gusto…” Yo creo que todos nosotros podemos darnos cuenta de lo lindo que se siente poder tener un amigo de muchos años, saber que esa persona te vio crecer, que tienen recuerdos juntos de cosas que pasaron hace ya mucho tiempo. Si bien es cierto, es normal que muchos amigos que antes estuvieron con nosotros noche y día, estén hoy ya muy distanciados de nosotros, debemos procurar mantenernos juntos con aquellos amigos verdaderos, mantenernos juntos a través del tiempo, de la distancia. El Perdón. Dice Martín Valverde, un cantante de música cristiana, que perdonar no es olvidar, es saber recordar sin dolor. El perdón no es más que un reflejo de amor; no podemos perdonar si no amamos a quien estamos perdonando. Nosotros estamos llamados siempre a amar, a nuestros amigos y a nuestros enemigos, de la misma forma en la que nos amamos a nosotros mismos (Lucas 10:27); por lo tanto, también estamos llamados a perdonar a nuestros amigos, como fruto de nuestro amor por ellos. Ahora bien, todo en teoría parece fácil de comprender, pero en la práctica, perdonar es algo más difícil de digerir, por ejemplo, aunque suene muy novelesco, pensemos en si la novia o el novio nos traiciona con el mejor amigo, ¿estamos dispuestos a perdonar, a reflejar nuestro amor por ellos en forma de perdón? Ahora bien, esta situación tan de telenovela, nos sirve también para hablar del siguiente punto que queremos tocar, la confianza. Pues si bien es cierto, podemos perdonas, y recordar sin rencor, las cosas muchas veces jamás podrán ser como antes, pues perder la confianza en un amigo o de la pareja, son palabras serias, la confianza tarda a veces años en formarse y consolidarse, y basta un segundo para perderla. La Confianza. Eclesiástico 27: 16-21. “… El que descubre secretos no es de fiar, no encontrará amigos íntimos. Ama a tu amigo y confíate a él; pero si has descubierto sus secretos no vayas más con él, pues como el que destruye a su víctima, así has destruido la amistad con tu prójimo; como pájaro que has dejado escapar de tu mano, así has perdido a tu amigo y no lo recobrarás. No vayas detrás de él, que ya está lejos, ha huido como gacela que escapa de la trampa. Pues una herida se puede vendar, pero el que descubre un secreto nada puede esperar…” Para este pasaje debemos entender que descubrir secretos no se refiere a darse cuenta de algo que el amigo guardaba, sino a contar los secretos que se habían confiado. Parece mentira que algo que tanta gente desvaloriza como un secreto, pueda ser tan importante; cuántas veces hemos oído chismes, y con el típico cuento de no le cuente a nadie, se van propagando y propagando aquellos secretos de dos amigos. Pues bien, la confianza es algo que debemos valorar en una amistad, y tener siempre claro que la pérdida de confianza implica pérdida de amistad, pérdida de un tesoro puesto por Dios en tus manos. Eclesiástico 22: 19-26 “… Quien hiere el ojo, hace brotar lágrimas; quien hiere el corazón, descubre sentimientos. Quien tira una piedra a los pájaros, los espanta; quien injuria a un amigo, rompe la amistad. Aunque hayas sacado la espada contra tu amigo, no te angusties, que aún puede haber arreglo; si has abierto la boca contra tu amigo, no temas, es posible la reconciliación; a no ser que haya ofensa, desprecio o un secreto descubierto, o golpe a traición, porque entonces tu amigo se irá. Gana la confianza de tu prójimo en su pobreza, para que en su prosperidad puedas gozar con él; en los días adversos permanece a su lado, para que cuando herede, recibas también tu parte. El humo y el vapor del horno anuncian llamas, así las injurias anuncian sangre. Jamás me avergonzaré de proteger a un amigo, ni me ocultaré para que no me vea; y si algún mal me sobreviene por su culpa, todos los que lo sepan tendrán cuidado con él…” Jesús. OK, hasta el momento hemos hablado muchas cosas sobre la amistad, basadas en el libro de Eclesiástico; para hacer un repaso rápido, hablamos de verdaderos amigos, de estar en las buenas y en las malas, sobre ser detallistas, sobre preservar amigos, sobre el perdón y la confianza. Si vamos viendo a Jesús en función de su amistad con nosotros, podemos ir descubriendo que Jesús está siempre, en las buenas y en las malas; que es lo suficientemente detallista como para alegrarnos la vida de mil formas, y que aunque muchas veces no abramos bien los ojos, él nos pasa regalando detalles todos los días de la vida, cada segundo; además Jesús nos preserva como sus amigos siempre, y nunca se ha alejado; sabe mucho de perdón, tanto así que entregó su vida, en una muerte en cruz para que todas nuestras ofensas fueran perdonadas; y podemos confiar en él, en su amor eterno; Jesús es el máximo ejemplo en todo, es la perfección divina hecha hombre, por lo tanto siempre es y será el mejor ejemplo de todo aquello que somos como hombres, es el mejor ejemplo de hijo, de pastor, de servidor, y en este caso de amigo. Un día nos dijo: “… Mi mandamiento es éste: Ámense los unos a los otros, como yo los he amado, Nadie tiene amor más grande que quien da la vida por sus amigos, ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. En adelante, y no los llamaré siervos, porque el siervo no conoce lo que hace su señor. Desde ahora los llamaré amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí a mi Padre…” (Juan 15: 12-15)